viernes, 26 de mayo de 2017

Psicoterapia breve, intensiva y de urgencia (P.B.I.U.)

El perfil básico de la psicoterapia breve intensiva y de urgencia

1.
Cinco o seis sesiones de 50 minutos, una vez a la semana
2.
Sesión de seguimiento un mes después
3.
Anamnesis completa
4.
Una apreciación psicodinámica y estructural
5.
Consideración de los aspectos sociales y médicos
6.
Plan para áreas de intervención
7.
Plan para métodos de intervención
8.
Plan para la secuencia de las áreas y métodos de intervención
9.
Decisión sobre una terapia solo diádica o combinada con sesiones conjuntas o familiares
10.
Consideraciones de condiciones favorecedoras como drogas u hospitalización breve


El perfil básico, como todas las proposiciones en este texto, pretende servir sólo como guía, no como algo obligatorio. Los pasos se mencionan en forma breve porque casi todos se discuten ampliamente en contextos más específicos.







La sesión inicial
¿
1. Síntoma principal
La primera sesión es indudablemente la más importante y la que comprende el trabajo más duro para el terapeuta y el paciente.
Trato de obtener mi primera impresión de éste, cuando lo veo en la sala de espera, y de preferencia unos segundos antes de que él me mire. En ese tiempo, la máscara social no habrá aparecido todavía.
Me intereso no sólo en el síntoma principal, sino en los otros posibles, y deseo saber precisamente cuándo empezó el actual. Siento que entiendo lo que inquieta al paciente sólo si puedo relacionar con claridad el inicio de este último y el de los otros a una situación particular de su vida en un día y hora dados.


2. Evolución del síntoma principal
Después insisto en una anamnesis exhaustiva. Conduzco una entrevista guiada, es decir, por las hipótesis de engranaje de la teoría psicoanalítica. Son por lo general un marco de referencia pero no deben conducir a una visión en túnel. Al preguntar los antecedentes, busco en especial los denominadores comunes entre el inicio del síntoma principal y situaciones anteriores en su vida.


3. Síntomas secundarios
A pesar de que el síntoma principal puede ser un ataque de ansiedad o depresión, el secundario quizá sea una dificultad sexual de varios años incapacidad para completar tareas o ser puntual. Es importante explora; estas áreas que pueden causar problemas al paciente y posiblemente tener alguna relación con el síntoma principal. Entrelazar el "insight" puede favorecer en gran medida el proceso terapéutico.

4. Antecedentes personales
La mejor guía que puedo ofrecer para capturar los antecedentes es que el terapeuta debe intentar visualizar a la persona que se encuentra frente a él en diferentes épocas de su vida, en especial en la infancia, en la actualidad dentro de la subcultura particular y en relación con las personas significativas en su vida. Además de la información sobre los padres, hermanos y sus respectivas edades, debe hacerse un intento por obtener ideas acerca de la atmósfera prevaleciente en su casa. Para este propósito, yo pido por lo general que asigne tres adjetivos a las personas significativas en su vida. En cada situación, es muy importante averiguar lo más que se pueda sobre los aspectos étnicos y culturales de la vida del paciente. Es importante ver a éste y a su problema en términos de la teoría de sistemas: familiar, etnicocultural y socioeconómico.


5. Antecedentes familiares
La familia nuclear es la matriz dentro de la cual una persona crece y se desarrolla. Por tanto, es esencial entender las características de ésta que más han tenido efecto en la estructura de nuestro paciente.
Es importante entender el medio y características familiares en diferentes épocas de la vida del paciente, por lo general los efectos más tempranos del daño tendrán una influencia más profunda sobre la formación de la personalidad. Es importante entender con quién se identificó el paciente en forma manifiesta y latente. La vocación de los padres juega un papel Importante en el desarrollo de su personalidad. Los antecedentes médicos y psiquiátricos de la familia del paciente son importantes.
Es mejor visualizar al paciente en relación con la familia en diferentes etapas de su vida, tratar de entender la formación del carácter y personalidad, y la psicopatología en términos de solución de problemas y conducta de imitación.

6. Formulación dinámica y estructural
La formulación dinámica, compatible con el término en sí, llamado "dina" o fuerzas se encarga de la interacción de éstas, responsables de la psicopatología Y personalidad del paciente. Evaluamos las tendencias y su conflicto e interacción con la realidad, el superyó Y el yo. Queremos entender las defensas, qué tan bien trabajan, si trabajan en forma rígida, holgada o apropiada.
La teoría de las relaciones objétales se ve como una parte de las dinámicas y estructural. Para empezar, involucra la relación hacia las figuras parentales, hacia otras, su internalización, y la internalización de las autorrepresentaciones. Estas imágenes se vuelven una parte de la estructura del yo en diferentes niveles así como el superyó y el ideal del yo. La diferencia entre la estructura y las dinámicas es hipotética.

EVALUACIÓN DE LA FUNCIÓN DEL YO


Además de la consideración de la psicodinámica, desarrollo y aspectos culturales y étnicos de la vida del paciente, me comprometo a una asesoría sistemática de 12 funciones del yo, de manera más formal y en detalle sólo con pacientes muy perturbados.

LOS TRES FACTORES EN LA RELACIÓN TERAPEUTICA

7. Transferencia
El sueño es un recurso importante, pero no el único para indicarnos la naturaleza de la relación transferencial. A partir de los antecedentes se debe intentar predecir cuál es la naturaleza de la· transferencia y qué problemas pueden anticiparse.
Es importante mantener una transferencia positiva en la psicoterapia breve y así mismo dejar al paciente con ella. Una transferencia negativa deberá analizarse.

8. Alianza terapéutica
Presento la alianza terapéutica con una fórmula específica: "La parte racional e inteligente de Ud. necesita permanecer junto con la irracional e inconsciente que le causa problemas". Puedo explicar en forma breve la naturaleza del proceso terapéutico· como lo veo, en la primera o segunda sesión, para incrementar esta alianza. Abrevio algunas ideas básicas: primero, que podemos entender la conducta si recordamos que hay continuidad entre la infancia y la edad adulta, el pensamiento al despertar y dormir y la conducta normal y patológica.
Explico al paciente que el éxito de la terapia depende en gran medida de la habilidad por parte de él para trabajar en alianza conmigo. Para no hacerlo sentir agobiado, añado que su trabajo principal es hablar solamente y que el mío es guiarlo tratando de entender o facilitar el resto del proceso.



9. Contrato terapéutico
El contrato en la psicoterapia breve está mejor delineado y formulado que en otras formas de psicoterapia prolongada. Explico a los pacientes que espero seamos capaces de abordar y resolver sus problemas en cinco sesiones, cada una de las cuales durará 50 minutos aproximadamente, y en todos los casos saber de ellos cerca de un mes después de la 5a. sesión, por teléfono, carta o en persona, y me digan cómo se encuentran.


10. Revisión y planeación
En tanto que escucha al paciente, el terapeuta debe formular hipótesis respecto a la interacción de los factores genéticos, familiares, biológicos y médicos con los vivenciales dentro del paciente. El terapeuta debe también decidirse por el mejor plan de tratamiento, entre tratamiento diádico, sesiones conjuntas, terapia familiar, de grupo, empleo de fármacos y de recursos comunitarios entre otros. Si la terapia breve intensiva va a Jugar un papel terapéutico primario; el terapeuta debe seleccionar las áreas y métodos de intervención y su secuencia.

Segunda a sexta sesión de la psicoterapia breve intensiva y de urgencia (P.B.I.U.)

Segunda sesión
·         Enlace con la primera.
·         Pensamientos sobre la sesión inicial, sueños, posición entre sesiones.
·         Enlace de las sesiones para mantener el enfoque e incrementar el funcionamiento sintético- integrativo.
·         Exploración adicional de sintomatología e historia.
En la segunda sesión exploramos más, obtenemos un mejor cierre, y reexaminamos las bases para escoger las áreas y métodos de intervención.
La inicio preguntando al paciente cómo se ha sentido en la semana de intervención, y trato de conocer cualquier otro síntoma que pueda tener.


Tercera sesión
·         Enfoque especial para trabajar mediante "insights" previos.
·         Empiece a hablar sobre la separación inminente.
En la tercera sesión se hace un intento especial para trabajar con lo aprendido además de las posibles causas. Esta puede ser la ocasión para una entrevista conjunta sí es que parece ser lo más útil para acumular información adicional entre dos personas.


A partir de la tercera sesión, empiezo a referirme a la separación inminente. De manera específica afirmo que es muy probable que el paciente se sienta peor la próxima vez y que esto puede ser por el miedo a la separación y al abandono.

Cuarta sesión
·         Como en la sesión anterior, pero haciendo más énfasis en la terminación.
La cuarta sesión está dedicada a lograr un mayor entendimiento sobre los problemas del paciente, agregando "insights" e interviniendo de alguna otra manera necesaria.

Quinta sesión
·         Haga que el paciente repase verbalmente todo el periodo de tratamiento.
·         Termine el tratamiento con un comentario positivo.
La quinta y última sesión regular, la inicio preguntando al paciente cómo pasó la semana anterior. Después le pido que repase todo el periodo de tratamiento y trabajamos con cualquier material adicional que hayamos obtenido, en especial respecto a la terminación o algunos otros planes.
Para facilitar la transferencia positiva se desecha, en la quinta sesión, cierta neutralidad terapéutica, hay que tornarse más humano, hablar sobre nosotros o algún pasatiempo compartido con el fin de disminuir la distancia de la relación doctor- paciente.


Sexta sesión
·         Sesión de seguimiento: evalúe los logros terapéuticos y decida si será necesario un trabajo posterior o no, deje al paciente con una transferencia positiva.
    En la sexta sesión, un mes después, trato de revisar la calidad de los logros terapéuticos y hago los cambios pertinentes. Otra vez hay un intento por dejar al paciente con una transferencia positiva y con un sentimiento de que si se necesita, yo o cualquier substituto estará disponible para él.

El proceso terapéutico en la psicoterapia breve intensiva y de urgencia (P.B.I.U.)

1. Guiar y controlar la intensidad del proceso terapéutico
En gran medida la P.B.I.U  puede ser eficaz por la naturaleza y manera de guiar el proceso terapéutico. Al prolongar el proceso de terapia, se usa el método de la atención selectiva o desatención para enfocar áreas que se consideran importantes, se regula la ansiedad sentida por el paciente. En ocasiones, es necesario abandonar la posición de neutralidad terapéutica para permitir una actitud más relajada entre dos iguales.
2. Facilitar la comunicación: un estilo apropiado es esencial
Es obligación del terapeuta asegurar que hay un proceso terapéutico, debe hacer posible que el paciente contribuya con su parte a la alianza terapéutica. Para la psicoterapia dinámica significa que el paciente sea capaz de comunicarse. Muchos pacientes no son capaces de tener insight o aprenderlo rápido para utilizarlo en terapia, en este caso se le pide al paciente que nos diga de modo concreto qué es lo que hizo en una situación en particular, y cómo se sintió en diferentes puntos.
A menudo se realizarán preguntas muy específicas para obtener información de qué es lo que está sucediendo dentro del paciente.

3. Explicar el proceso terapéutico al final de la sesión inicial en términos sencillos
En esencia, se le explica al paciente que su experiencia pasada se ha almacenado como un gran número de imágenes. La neurosis u otras distorsiones patológicas son el resultado de una influencia excesiva de apercepciones del pasado sobre la cognición actual. La misión de la psicoterapia es identificar y entender la naturaleza de la distorsión de la cognición presente por experiencias del pasado y de este modo producir algo parecido a una corrección perceptual y cambio estructural.
4. Facilitar el aprendizaje: estilo intelectual, conceptual y lingüístico adecuado
Debe recordarse que la psicoterapia es un proceso de aprendizaje y reaprendizaje y es labor del terapeuta facilitarlo haciéndolo tan concreto, vívido y vistoso como sea posible.

5. Técnicas proyectivas
En ocasiones se encuentra útil emplear técnicas proyectivas como vehículo de interpretación y comunicación. Por ejemplo, usando láminas del test de Apercepción Temática o manchas de Rorschach se pueden obtener respuestas que indiquen agresión latente. De este modo las técnicas proyectivas pueden usarse para incrementar la disposición psicológica y hacer egodistónico lo que a menudo es egosintónico para él.
6. La importancia de la educación: en tratamientos de urgencia de reacciones emocionales a enfermedades físicas, haga que el paciente describa el órgano enfermo
Esto permite al terapeuta observar una demostración concreta de la distorsión de la realidad del paciente. Este enfoque también proporciona una oportunidad para informarle sobre las realidades de su trastorno, lo cual siempre es más fácil de tolerar que las fantasías e ideas irracionales que ha imaginado.
7. Comunicación entre paciente y terapeuta

Una vez que el paciente comienza a comunicarse el terapeuta se hace una idea de los denominadores comunes entre la conducta presente, la historia pasada y la relación terapéutica. Cuando el terapeuta reconoce los denominadores comunes y cuando la toma de tiempo es correcta, según los criterios técnicos, el terapeuta debe informar al paciente sobre éstos.
8. Interpretación
La interpretación es el proceso clásico de intervención en la psicoterapia dinámica, sin embargo, no es el único.
9. "Insight"
Esta es una experiencia muy semejante a la expresión de conocer súbitamente más que descubrir una respuesta de un crucigrama o una pieza de rompecabezas. La respuesta debe tener fuertes componentes afectivos y no existir sólo como un proceso intelectual.
10. Trabajando en ello
Puede definirse como la aplicación de los insights aprendidos en una situación a una variedad de situaciones distintas.
La psicoterapia breve intensiva y de urgencia (P.B.I.U.) de sucesos catastróficos en la vida
Consideraciones teóricas
El impulso comprensible cuando se trata con alguien que sufre el impacto de una experiencia catastrófica es enfocarse al suceso inmediato. El hecho es, por supuesto, que tal suceso tiene que considerarse también dentro del contexto de la experiencia de vida completa de la persona y explorar su significado específico. El incidente actual se tiene que comprender en términos de sus distorsiones aperceptivas, producto de todos los sucesos anteriores de su vida, ya que cualquier suceso catastrófico tendrá diferentes significados para cada persona.
Como en todas las situaciones agudas, es apropiada una cierta cantidad de tacto. Alguien acaba de sufrir la pérdida de un familiar cercano o ha estado en un grave accidente, no es alguien a quien se la deban hacer interpretaciones. Ni debe pedírsele que comente algo al respecto. Cierta comprensión, apoyo emocional y la promesa de ayuda futura, es lo adecuado al principio.

Diez factores específicos referentes a sucesos catastróficos en la vida
1. Catarsis
Significa en forma literal, limpiar o purgar, y se podría suponer que el simbolismo se tomó del tracto digestivo.  Freud empleó el tratamiento catártico al inicio de su carrera, este tratamiento se basó sobre la idea de que los fenómenos perturbadores se suprimen o reprimen con frecuencia.



El hecho es que el concepto de catarsis permanece útil clínicamente. Se utilizó ampliamente en la  psiquiatría en el frente de batalla durante la Segunda Guerra Mundial y fue el concepto subyacente en el manejo terapéutico de los pilotos derribados.  Con la ayuda pentotal sódico por vía intravenosa  se les daba la oportunidad de transelaborar la experiencia traumática y, de ese modo, “purgarla de su sistema”. Una variedad de “terapias” actuales, se basan principalmente en la catarsis. La idea del grito primario se basa en “purgar el propio sistema”. El hecho lamentable es que la catarsis, por si sola, en general no es suficiente para producir verdadero cambio. Conduce cuando mucho, a un alivio temporal que, en general, al poco tiempo se ve seguido por la recurrencia de los síntomas o por nuevos síntomas, a menos de que se utilicen otras intervenciones dinámicas después de la catarsis.


2. Significado especifico del suceso
Cualquiera que sea la crisis que lleva al paciente a terapia, es importante tratar de entender el impacto de la crisis actual en  términos de la situación vital  del paciente. Una víctima de un accidente puede responder sintiendo principalmente una amenaza a su capacidad para mantener  el control, mientras tanto otra presentará temores a la  mutilación o problemas de narcisismo.
La palabra "principalmente " merece especial atención: cada crisis involucra cinco o seis factores básicos cuyo rango por orden de importancia variará de persona a persona, de modo que un factor sobresaliente para una, será de importancia mínima para otra.
El terapeuta debe conocer en términos aproximados los factores que generalmente son relevantes para cada crisis: sin proposiciones generales no existe la ciencia. En este sentido, el psicoterapeuta utiliza el conocimiento y normas de su profesión en la misma medida que el cirujano emplea las guías óptima de las intervenciones quirúrgicas.

3. Exploración de la “responsabilidad” y culpa
La experiencia de la culpa inconsciente  es un fenómeno muy difundido, cuyas huellas se pueden seguir hasta tiempos remotos, Cuando sucedía un terremoto o una tormenta destructiva, los antiguos y primitivos lo interpretaban, de manera inmediata, como el enojo de los Dioses, un enojo que presumiblemente era el resultado de que se hubiera pecado de alguna forma.
Este primitivo y no específico sentimiento inconsciente de culpa, representa un papel en la vida de casi todos y, en algunas personas, se encuentra en forma excesiva. En general entre más estricta haya sido la crianza, es más probable que se tenga un sentimiento de ser “malo”, en general, también estarán presentes ciertos sentimientos de culpa relativos a pensamientos sexuales y agresivos y ciertos rasgos masoquistas.

4. Secuela Crónica
Cualquier suceso catastrófico, en especial si no se ha "trabajado ello” puede conducir a toda una variedad de trastornos crónicos. Por lo tanto, en el caso de  sucesos catastróficos, es importante ayudar al paciente a tratar con la experiencia aguda, trabajando en ello por vía de apoyo catártica, y cualquier otra medida terapéutica adecuada para disminuir la secuela crónica continua.

5. Respuestas específicas a la pérdida de empleo y jubilación
Obviamente, la pérdida de empleo significa más que una amenaza financiera. En nuestra cultura, una persona se mide según el trabajo que desempeña. Un ejemplo significa un determinado papel, una identidad y un cierto lugar dentro de la jerarquía. Proporciona una estructura bien definida, que la mayoría de las personas requiere. Se necesita un lugar a donde ir por la mañana, un lugar a donde retirarse por las noches y tareas específicas que realizar, sin lo cual muchas personas se sienten perdidas, Muchos empleos dentro de su contexto, apoyan aspectos significativos de autoestima. El jefe de familia, que es quien acostumbra traer el sustento a casa, se siente seriamente amenazado por una pérdida de empleo. En la P.B.I.U. de la pérdida de empleo el terapeuta debe enfrentarse a problemas de autoestima, cambio de papeles entre otros, según su rango de Importancia en cada individuo.

6. Respuestas específicas a la pérdida por muerte: duelo”
La persona en duelo debe adaptarse a esta pérdida de continuidad de la relación con la persona fallecida. Es un recordatorio traumático de la propia vulnerabilidad y mortalidad. Además, con frecuencia altera la vida social, económica y emocional de la persona. Estos y muchos otros aspectos del duelo incluyen, de hecho, "trabajar en ello", es decir una nueva adaptación para que se acostumbren a la situación actual, encontrando otros modelos de relación. Además tienen que definirse los sentimientos hada la persona fallecida.

 El terapeuta no debe intervenir activamente en el trabajo de duelo, en tanto el paciente lo esté llevando a cabo por sí mismo. Sólo intervendrá en esta dinámica cuando se ha resuelto parte de la fase más aguda, y el paciente parece necesitar ayuda, entonces sólo se le proporcionará en una forma apacible muy cuidadosa.

7. Respuestas específicas al asalto y robo
La personalidad del individuo determinará el grado de impacto y la naturaleza de su respuesta hacia lo sucesos traumáticos. Mientras más grande sea el temor a la pasividad, mayores serán los efectos de robo, asalto y otros crímenes. Es importante señalar que algunas personas son patológicamente no conflictivas a la pasividad. Los problemas de autoestima suelen aparecer con más frecuencia en los hombres involucrados en crímenes violentos que en las mujeres. Si un hombre fallas al ser atacado, tiende a sufrir cierta depreciación en su autoimagen.

Los testigos de un acto violento deben considerarse tan serios como los de las víctimas. Todo lo que el terapeuta puede hace en tal circunstancia trágica, es ayudar al paciente, trabajando en ello, la experiencia en términos de sus propias psicodinámicas, antecedentes e historia general de su situación de vida. Debe analizarse el significado especial de cualquier tipo de violencia hacia una persona determinada a la luz  de su historia personal.

8. Respuestas específicas a la violación
La violación se contempla en la actualidad como un crimen de violencia y no primordialmente un acto de naturaleza sexual.
Por lo general, la violación provocará sentimientos de impotencia y pánico en relación directa con la historia individual. En situaciones tempranas infantiles –seducción, juegos sexuales forzados y escena primaria, entre otros-, pueden revivirse intensamente.
Las reacciones a la violación se agrupan en 4 fases:
1.      La fase anticipatoria o de “amenaza” describe el equilibrio fino entre la necesidad de proteger la ilusión de vulnerabilidad y la conciencia de la realidad amenazante, con algún intento de protegerse a sí misma (y prepararse para) el peligro.
2.      La fase de impacto provoca un mayor estado de alerta como mecanismo de defensa, seguido de una disminución del mismo, aturdimiento, desinterés, perturbaciones afectivas y de memoria, y una desorganización general.
3.      En la fase de retroceso existe un regreso a la expresión emocional y a la conciencia. Es aquí donde el terapeuta puede ser particularmente útil para ayudar a la paciente en su reconstrucción.
4.      En la fase postraumática, el paciente se ha reconstituido al máximo y puede evocar el suceso reparando todo el daño temporal hecho.

9. Respuestas específicas a los accidentes
Los accidentes son a menudo una forma de "acting out". Por ejemplo, se cree que muchos accidentes automovilísticos son intentos de suicidio o suicidios. El terapeuta debe  explorar profundamente todos  los detalles que rodean al accidente, incluyendo en especial el contenido del pensamiento y las preocupaciones del paciente antes, durante y después del suceso.
Como siempre, la tarea principal del terapeuta es encontrar los denominadores comunes entre el suceso precipitante y las situaciones históricas en la vida del paciente, para ayudarle a entender y tratar su trauma.

10. Respuestas especificas a la amenaza de catástrofes ecológicas
Una de las características de nuestra década es la amenaza de catástrofes ecológicas que conllevan la advertencia de muerte inmediata o un estado moribundo muy prolongado.
Es muy posible que un número cada vez mayor de pacientes se presente en clínicas y consultorios privados, con reacciones de pánico de un tipo u otro, como respuesta directa a amenazas ecológicas. Como en todas las situaciones catastróficas, es posible que las fantasías terroríficas, excedan incluso la simple realidad. Será importante ayudar no sólo con una confianza realista; sino reduciendo las fantasías irracionales que complican la habilidad para enfrentar la realidad.


La psicoterapia breve intensiva y de urgencia (P.B.I.U.) de las fobias (e histerias de ansiedad)

Consideraciones teóricas: Las fobias (e histerias de ansiedad)
Las fobias e histerias de ansiedad, se encuentran muy relacionadas dinámica y fenomenológicamente. También se hallan con frecuencia interrelacionadas y coexisten en la misma persona. Frecuentemente las fobias son problemas viejos, pero en ocasiones alcanzan condiciones de urgencia. Algunas proposiciones generales son aplicables a todos los tipos de fobias: el temor tiene que involucrar una tendencia temida. Puede ser una tendencia agresiva, o existir una variedad de temores sexuales.


Diez factores específicos en el manejo terapéutico de las fobias

1. Dinámicas específicas de las diferentes fobias
Como una fobia específica, la agorafobia es posiblemente la que con más frecuencia se encuentra. Puede tomar la forma de una incapacidad para cruzar las calles, viajar cualquier distancia lejos de casa; salir de ella sin, la compañía de una persona que sirva como símbolo contrafóbico.
De manera clásica, creemos que el miedo de los impulsos regresivos dificulta dejar a la madre por temor a que ella sea la víctima de los deseos de muerte propios -en tanto que uno no está mirando. Es muy importante explorar sentimientos de ambivalencia hacia la figura materna, cuando se toma la historia. Respecto al miedo de separación, los agoraf6bicos pueden conducirse bien cuando se acompañan de una figura contrafóbica.

2. Fobias específicas como parte de un contexto familiar y cultural
Además de las dinámicas individuales, varios tipos de fobias se adquieren por "contagio": puede aparecer en familias enteras y ciertas fobias específicas deben entenderse como parte de un contexto familiar. También deben considerarse ciertas condiciones culturales.

3. Patogénesis individual sobredeterminada de las fobias

A pesar de que existen, proposiciones generales para la mayoría de las fobias, y algunas para las específicas, hay también aspectos individuales para cada reacción fóbica, que se dan en ciertos individuos y no en otros.
Al estudiar el inicio de la fobia (o histeria de ansiedad) se revelarán con más claridad las características individuales. Mientras más específicamente se establezca el inicio, se obtendrá' más "insight" sobre el significado concreto.

4. Pida al paciente que afronte la situación fóbica y se comunique de nuevo
Algunas consideraciones generales: en todos los casos, después de una exploración inicial de las dinámicas del problema, se tiene que pedir al paciente que enfrente la situación fóbica y se comunique después, lo cual proporciona un material adicional para su comprensión. Es muy sencillo en la psicoterapia, hacer que el paciente entienda intelectualmente el problema. Es esencial que el paciente se atreva a encarar la situación que provoca la ansiedad durante el tratamiento.

5. “Trabajando en ello” mediante “insights” obtenidos en la situación fóbica actual
“Trabajar en ello” mediante “insights” logrados en la situación fóbica actual es muy importante y se relaciona con la idea del reacondicionamiento. Cada “insight” adquirido en forma cognoscitiva tiene que aplicarse en estas situaciones. Debe existir un intercambio constante entre los procesos de aprendizaje por “insight” y por condicionamiento, a fin de obtener óptimos resultados terapéuticos.

6. Fármacos para alivio sintomático de algunas fobias
Los fármacos, en especial los antidepresivos y energizantes, son de gran utilidad en el alivio sintomático de ciertas fobias. De gran ayuda en casos donde las fobias interfieren con el funcionamiento cotidiano, incluyendo el poder realizar un empleo. No es probable que los fármacos logren más que él alivio sintomático hasta que se haya aplicado la psicoterapia.

7. Símbolos y defensa contrafóbicos
Un paciente fóbico puede, al principio, tener que venir acompañado al consultorio por una persona que funcione como una protección contrafóbica, hasta que los fármacos o la interpretación hagan esto innecesario. Es una superstición muy difundida el que una moneda, medalla o pata de conejo, protegen desde accidentes hasta de mal de ojo. El símbolo contrafóbico funciona de la misma manera, ya sea un objeto o una persona.

8. Fobias migratorias
Algunos pacientes fóbicos sufren, al principio, ataques de ansiedad libre, flotante, y por lo general después de cieno tiempo, esta ansiedad se "fija" en forma de histeria de ansiedad o en ocasiones de una fobia. En otras, la ansiedad se convierte en depresión. El hecho es que hay que recordar que todos los síntomas son intentos de afrontar: en ocasiones un síntoma y en ocasiones otro, afrontan la ansiedad básica.
Hasta cierto punto, m1entras más limitada sea una fobia, es menor lo que afecta el estilo de vida. En tanto más generalizada, será más dañina. Algunas personas no pueden llegar a una configuración óptima de fuerzas de temores y defensas contra ellas, y por tanto padecen histerias de ansiedad y fobias que cambian con frecuencia en forma de fobias migratorias.

9. Panfobias
Son parecidas a las fobias migratorias, excepto por el hecho que el paciente, siente temor de muchas cosas a la vez. Puede sentir temor a enfermarse por tocar objetos supuestamente contaminados conjuntamente con el temor de que se caigan unos ladrillos. En la actualidad, los pacientes informan padecer de un trastorno limítrofe. Excepto por cierto efecto sobre aspectos aislados de la disfunción, la terapia breve y para ese problema a largo plazo, sólo tiene pocas posibilidades de lograr una diferencia; y en este caso únicamente tratando con las dinámicas básicas complejas y muy primitivas.

10. Delirios somáticos.

Los delirios somáticos, al igual que las panfobias, pertenecen a las condiciones más desconcertadas, bizarras y terapéuticas frustrantes. Es importante no confundir una fobia o histeria de ansiedad. Esto sucede muy a menudo, para desgracia del paciente y terapeuta.

La psicoterapia breve intensiva y de urgencia (P.B.I.U.) del pánico

Consideraciones teóricas
El pánico puede ocurrir en el paciente en varias formas. Los tres tipos principales son: endógeno, exógeno y pánico mezclado.
·         El pánico endógeno: se caracteriza por la manifestación de un sentimiento de pavor, el cual por lo general incluye manifestaciones somáticas como dificultad en la respiración, palpitaciones del corazón, ruborización: existe el temor de que algo terrible sucede, como una muerte inminente, algún desastre o el “volverse loco”. Es muy semejante a la ansiedad libre, flotante; pero mucho más grave. La causa del pánico o ansiedad es desconocida para el paciente. Este trastorno sucede a menudo en psicosis incipientes, pero también puede ocurrir con gran ansiedad de individuos no psicóticos.
·         El pánico exógeno: es precipitado por un suceso externo, como violación, asalto, accidente, entre otros.
·         El pánico mezclado: pánicos inducidos por drogas callejeras específicas. Puede ocurrir en ocasiones con el uso de fármacos prescritos. Me refiero a él como “mezclado” porque sabemos por un lado, que la droga lo ha provocado, y por otro, que provee el surgimiento de fantasías únicas a la personalidad del paciente.

Diez factores específicos en el manejo terapéutico del pánico

1.     Establezca la causa inconsciente del pánico endógeno
Existe una cantidad de patrones dinámicos que son las causas principales del pánico endógeno: temor a la pérdida del control de impulsos, ya sea de naturaleza sexual o agresiva, reacciones de aniversario, que se presentan la mayor·parte de las veces como depresión, ansiedad de separación, en especial en los individuos que necesitan relaciones simbióticas, drogas, como la mariguana, LSD o anfetaminas, pueden provocar estados alterados de la mente, recuerdos repentinos y en consecuencia estados de pánico agudos. En ocasiones, las fenotiacinas pueden provocar paradójicamente reacciones de pánico, reacciones de superyo severo en respuesta al incremento de sentimientos y conductas sexuales o agresivas, masoquismo moral, del cual es un aspecto la neurosis de éxito. Cualquier logro nuevo, incluyendo el progreso terapéutico, toma un significado edípico prohibido al que se responde con pánico, una disminución súbita en la autoestima. Esto puede conducir a la larga a una depresión y bajo ciertas circunstancias al trastorno maniaco, despersonalización, por lo general un surgimjento de sentimientos inaceptables de agresión de una parte del yo contra otra, desrealización, aun en las formas más leves como déja vu, puede producir pánico secundario por la mera naturaleza de la experiencia subjetiva, sucesos traumáticos muy fuertes pueden provocar pánico. 

2.     Continuidad entre el pánico inmediato, factores precipitantes y antecedentes.
Es esencial demostrar con claridad al paciente la continuidad existente entre el pánico inmediato, los factores precipitantes y la historia de su vida. Ello cuando menos proporciona al paciente, cierta sensación de control sobre lo que parece atemorizantemente egodistónico.

3.     Explicación intelectual como parte del establecimiento de la continuidad
La discontinuidad de la experiencia es responsable de gran parte del trastorno; por lo que una comprensión Intelectual tiene generalmente un efecto de dar seguridad al paciente ayudándole a ver la continuidad: se siente "menos loco".

4.     Pánico exógeno: significado inconsciente del suceso externo
Deriva en gran parte su carga emocional del significado inconsciente que tiene para el paciente. Un joven, por ejemplo, encontró su carro destruido en un acto de vandalismo, el pánico que experimentó estaba relacionado con su identificación con éste. Sintió que podría también ser víctima de este tipo de agresión en cualquier momento.

5.     Convierta el pánico exógeno en endógeno, haciéndolo egodistónico
La tarea principal del terapeuta es enfatizar que otras personas han tenido experiencias similares y manifestado menos ansiedad, y explorar la reacción particular del paciente en el contexto de la situación específica que induce el pánico y dentro del contexto más amplio de su historia personal, conflictos preexistentes e idiosincrasia de distorsiones aperceptivas.

6.     El pánico endógeno como parte de una psicosis incipiente.
La causa inconsciente que no se percibe muy bien, origen de la inquietud del paciente, es su temor de que aparezca repentinamente el proceso primario y deteriore en forma crítica su juicio y contacto con la realidad.
También contribuye al pánico el temor de una posible pérdida de control de impulsos: "puedo empezar a saltar y gritar o golpear a la gente".
La principal maniobra terapéutica será mostrar al paciente la continuidad entre su temor y las circunstancias o experiencias precipitantes, ello debe tener un efecto tranquilizante, ayudándolo a sentir que, después de todo, no está "perdiendo su dominio".

7.     Esté completamente disponible para el paciente.
La primera regla que debe seguir el terapeuta en una situación de pánico es estar completamente disponible para el paciente. Ya que éste se siente completamente indefenso, debe hacérsele sentir que el terapeuta se encuentra ahí para ayudarlo.

8.     Proporcione una estructura.
Cuando un paciente viene a una primera sesión en estado de pánico, el terapeuta debe, como en todas las situaciones de crisis tratar los acontecimientos más inmediatos. Conocer al paciente, obtener datos sobre el mal principal y los que se relacionen con él, la historia de su vida y los factores precipitantes relacionados con su pánico actual, y las razones que lo hicieron decidir buscar ayuda profesional en ese momento.


9.     Interprete la negación
El terapeuta debe estar alerta a la operación de negación y represión e interferir activamente en ellas cuando son excesivas, señalando al paciente que su pánico surge siempre cuando un estímulo o excitación se niega o reprime.

10.  Utilice catarsis o catarsis mediata.
Debe alentarse la expresión catártica de los afectos e ideaciones asociadas con el pánico. El procedimiento establece al terapeuta como una persona útil e interesada en el caso, le permite apreciar el contenido dinámico y forma del temor y, al mismo tiempo, proporciona una descarga de tensión suficiente para que el paciente sea receptivo a intervenciones terapéuticas posteriores.

La psicoterapia breve intensiva y de urgencia (P.B.I.U.) de los sentimientos de irrealidad del yo y del mundo

Consideraciones teóricas
El individuo en un estado de despersonalización se siente cambiado en contraste con su estado de bienestar anterior. Se siente observador; en efecto, un espectador de sí mismo. Siente una pérdida de su propia identidad. Con frecuencia, piensa que ya no tiene un yo al que pueda referir fuerzas y conducta directiva. Siente que ciertas partes de su cuerpo o de su mente son ahora extrañas y que no le pertenecen. En estados extremos sentirá que ya no tiene un cuerpo o que no está vivo. Estos sentimientos se pueden extender al medio: el cual aparecerá de igual manera como extraño al paciente donde parecerá haber perdido sus características de realidad. Puede creer que no hay mundo; experimenta desrealización.


Diez factores específicos acerca de sentimientos de irrealidad del yo y del mundo

1. Coexistencia de sentimientos de calidad del yo y del mundo
Es imperativo pensar sobre la despersonalización (y desrealización) como una variación más o menos extrema de los cambios en la autopercepción y los sentimientos de irrealidad como variantes similares de la percepción del mundo que ocurren en forma constante en la vida normal. Estos cambios pueden estar a menudo en un nivel preconsciente, donde el grado de conciencia depende de circunstancias y variaciones individuales de la introspectividad. Los cambios en la autopercepción se asocian siempre con los cambios en la percepción del medio.

2. Un continuo de patología
Un ejemplo común de despersonalización leve, es el que se da por temor en el escenario, donde el cambio simultáneo de papel y percepción del yo y del medio es claramente evidente. La persona afectada siente no sólo que es otra la que está hablando o actuando y que la voz no suena como la suya, sino además que los minutos parecen horas y que unos pasos parecen kilómetros. Las percepciones del yo, del espacio y del tiempo se encuentran alteradas.
Se obtienen diversas ventajas al ver la despersonalización como una variación en un continuo de autoconciencia. La primera es que obvia la tendencia a identificar a la despersonalización sólo con trastornos psiquiátricos específicos. Una segunda ventaja de considerar a la despersonalización como un fenómeno perceptual general es que elimina la tendencia a definirla de manera muy limitada como un proceso psíquico especifico o inclusive simplemente como una defensa.

3. Estados de elevación y conciencia cambiada del sí mismo o del cuerpo
Los fenómenos disociativos pueden aparecer en una gran variedad de forma, cumpliendo un amplio espectro de experiencia y conductas. Las formas leves más comunes incluyen a menudo una combinación de despersonalización y desrealización, 'por ejemplo, sentimiento de "extravagancia", no estar "con él", "estar fuera mirando hacia adentro", sentir que "mi cabeza está llena de algodón;' o "encerrado en una pared de cristal". Algunas personas (por lo general histéricas) con sentimientos relativamente leves de desrealización, de hecho provocan la experiencia, sin saberlo; por ejemplo, si una persona mira de cerca un objeto en tanto que enfoca hacia "el horizonte, las pupilas se dilatan y la imagen cercana aparece borrosa, fuera de foco, A su vez, lo borroso de la imagen en la retina provoca sentimientos de irrealidad de ser eliminado del ambiente. El explicar el proceso al paciente Y demostrándole que pueden producirse los síntomas, logrará un efecto de seguridad. Una medida más efectiva es tratar las dinámicas de la negación.

4. Aspectos agresivos, sexuales, exhibicionistas y de separación
El fenómeno de la despersonalización aparece con frecuencia con el surgimiento de impulsos agresivos, problemas de separación y menos específicamente de situaciones de hambre de estímulos o deprivación. En ocasiones del surgimiento de impulsos agresivos poderosos que no son aprobados y que entonces se dirigen en contra del sí mismo, estos impulsos establecerían una situación en la cual una parte del sí mismo ve a la otra con desaprobación y connotaciones agresivas. La parte observadora se torna en muy crítica de la parte extraña. Hasta cierto punto, esta es una señal de algún trastorno alarmante, muy similar a la teoría de la señal de ansiedad de Freud. Aquí, la sensación de despersonalización sirve como una señal de que algo anda mal, de que existe un fuerte conflicto entre algún impulso y el superyo. 

5. Trastornos del sentido del sí mismo como trastorno intrasistémico del yo
Cuando la función de autoobservación del yo se incrementa con frecuencia provoca un sentimiento de despersonalización. Parece robar a la persona el sentimiento necesario de "automaticidad" de la conducta. El paciente se queja de escuchar todo en su cabeza antes de decirlo. Se siente artificial, removido y desprovisto de emociones apropiadas. En este estado, una parte del sí mismo observa a la otra, en ocasiones como una defensa contra la agresión. Clínicamente, los pacientes se quejan entonces de autoconciencia, falta de espontaneidad e incapacidad para "estar con ello". Se sienten afuera viendo hacia adentro, como actores en una obra. Terapéuticamente, la tarea principal es ayudar al paciente a "ponerse en contacto con estos sentimientos de separación, haciéndolos aceptables.


6. Separación relacionada a factores físicos
Ciertas personas reaccionan a la mariguana o a otras drogas callejeras con pánico porque les provoca sensaciones de extrañeza, lo que también puede suceder debido a procesos fisiológicos simples, como se mencionó. Terapéuticamente, es necesario tratar con medicación "charlar" educación y tratar los factores subyacentes inconscientes.

7. Estados de irrealidad inducidos por fármacos (fármacos de prescripción y de la calle)
Muchas personas tienen experiencias disociativas relacionadas con el tomar una cierta variedad de drogas. Estas provocan distorsiones del medio, conduciendo a sentimientos de desrealización y perturbaciones en los límites corporales, conduciendo a experiencias de despersonalización. Los efectos laterales de drogas como la mariguana y los alucinógenos (LSD o mezcalina, por ejemplo) no se limitan de manera necesaria al tiempo en que la droga se encuentra activa farmacológicamente. Pueden ocurrir "recuerdos repentinos" los que causan un retomo a estas experiencias perturbadoras cuando el paciente está tenso por alguna circunstancia, incluyendo, en ocasiones, periodos en la psicoterapia en sí que producen ansiedad. Es menos reconocido que algunos esquizofrénicos, en especial los que están conscientes de su enfermedad, responden a las fenotiacinas con un sentimiento perturbador de estar "separados".

8. Fenómenos déja vu y déja reconnu
El fenómeno déja vu (la sensación de haber visto algo con anterioridad) y el fenómeno déja reconnu (la sensación de haber vivido algo anteriormente) parecen ocupar un lugar entre la despersonalización y la proyección. La experiencia posee sobre todo la calidad de extrañeza; parece misteriosa, provoca ansiedad y a menudo hace que uno se sienta tan raro hasta el punto de la despersonalización. En este caso, la percepción externa puede verse afectada por fantasías pasadas) por congruencia con experiencias anteriores. Conviene una interpretación de la conexión entre las dinámicas contemporáneas y genéticas. El fenómeno déja vu puede prestarse para una ilustración de cómo casi todas las personas pueden tener sentimientos de irrealidad bajo ciertas circunstancias por ejemplo, cuando el sistema moderno de transporte rápido permite a una persona moverse de una cultura o ambiente a una extraña, en un periodo corto de tiempo.

9. Consideraciones terapéuticas generales
Por lo general es muy útil proporcionar al paciente cierta conciencia intelectual del proceso de despersonalización, asegurándole que su caso no es único y que el fenómeno no es individual, sino algo que el terapeuta entiende bien, que ha sido encontrado en muchos otros casos y puede observarse bajo ciertas circunstancias normales
Se le puede mostrar que la hiperventilación provocara una alcalosis, un cambio en el pH de la sangre, que a su vez provoca una amplia gama de fenómenos, desde un hormigueo en diferentes partes del cuerpo, espasticidad de diversos músculos, hasta cefaleas y tensión en los músculos fuertes del cuello. Si la hiperventilación tiene un papel frecuente en la inducción de la despersonalización, puede enseñársele al paciente una técnica de respiración específica.

10. Tratamiento con fármacos
A menudo pueden aliviarse los síntomas inmediatos, donde la despersonalización es inducida principalmente por una experiencia que provoca ansiedad con el uso de fármacos como meprobamato (Miltown, Equanil) y diacepóxido (Librium), entre otros.
La tarea terapéutica, aun con la ayuda de los fármacos, es difícil si los sentimientos de despersonalización se deben a la necesidad de relaciones simbióticas. En tales casos, probablemente sea necesario "trabajar en ello" el problema dinámico.



Bibliografía:
Bellak, L.. (1986). Manual de psicoterapia breve, intensiva y de urgencia. México, DF: El manual moderno, S.A de C.V.




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